Carlos Navarrete "NAVA.CNV"
Efraín no escapó de sus actos de maldad y recibió el castigo divino, que lecciones podemos sacar de su mal ejemplo.
LA TRIBU DE BENJAMÍN UN MAL EJEMPLO QUE NO DEBEMOS IMITAR
ORIGEN DE LA TRIBU DE BENJAMÍN
El origen de la tribu de Benjamín proviene de uno de los hijos de José, su hijo menor, el mayor se llamaba Manases, este hijo lo tuvo José con su esposa Asenat, la hija de Potifera el sacerdote de On.
José le puso el nombre de Efraín debido a que pensaba que Dios lo había hecho fructífero en la tierra de su misería Génesis 41: 50-52.
La tribu de Efraín fue la más importante del reino norteño de diez tribus, debido a que Jehová escogió a Efraín en lugar de Manasés
que era el primogénito.
que era el primogénito.
¿CÓMO LLEGO EFRAÍN A TAN ALTO GRADO DE MALDAD?
El capítulo 7 de Oseas, del alto grado de maldad en que habían incurrido los habitantes de la tribu de Efraín, donde se practicaba, la mentira, el robo, asociaciones estrechas con naciones que no adoraban al Dios verdadero Jehová, era algo común y frecuente en el que estaban incluidos sus reyes y príncipes.
Los habitantes de Efraín, estaban tan alejados de su Dios, que no confiaban en Él, sino en otras naciones poderosas a quienes recorrían por ayuda, en este caso Egipto y Asiria Oseas 7: 11.
CONSECUENCIAS DE LA MALDAD DE EFRAÍN
Debido a sus graves actos de maldad, Jehová Dios decide disciplinarlos, pero antes amorosamente les advierte por medio de su profeta Oseas, que no escaparán de sus disciplina, debido a las múltiples advertencias que ya les había dado con anterioridad y a lo que los habitantes de la tribu de Efraín no habían hecho caso
LECCIONES DEL CAPÍTULO 7 DE OSEAS
Que aprendemos del capítulo 7 de Oseas:
Que Jehová es un Dios justo, que ama la justicia y la exige de sus siervos, y cuando sus siervos de desvía de la justicia y empiezan a practicar la maldad, Jehová los disciplina, primero en base a advertencias por medio de sus profetas, y si no escuchan viene la disciplina en forma de castigo que puede ser muy severo, dependiendo de las circunstancias.
Este capítulo nos permite discernir, a las personas que vivimos en la actualidad que no escaparemos del Dios de justicia Jehová si practicamos la maldad, cualquiera que sea la modalidad.
En la actualidad vemos que la maldad se ha afianzado fuertemente en la tierra, el robo, la mentira, el adulterio, la fornicación, los asesinatos, las agresiones dentro del matrimonio, la homosexualidad, son prácticas frecuentes en la mayoría de los países de la tierra, esta maldad no sólo lo practican personas comunes y corrientes, también es algo frecuente en autoridades cuya función es impartir justicia como jueces y fiscales que reciben coimas y sobornos, para librar de la acción de la justicia a personas que violan la ley, asimismo están incluidos presidentes, ministros, reyes, príncipes y funcionarios de los gobiernos quienes se coluden para practicar la maldad a los ojos de Dios, es evidente pues que el Dios de justicia Jehová nos pedirá cuentas, a todos los habitantes de la tierra no importando su condición social, ni su patrimonio económico ni linaje, en este sentido el Dios verdadero, es un Dios de justicia y acabará con la maldad.
Otra lección que podemos aprender es a confiar en potencias o países considerados potencias mundiales, la tribu de Efraín cometió ese error confío en Egipto y Asiria en lugar de poner toda su confianza en el Dios verdadero Jehová, a Dios no le agradó que no confiarán en Él, y castigo severamente a Efraín.
Que podemos decir de la actualidad, la gente aún los que manifiestan creer en Dios, y tener su religión en la mayoría de los casos no confían en Dios, sino en sus propios esfuerzos, en el poder económico, en la política y en gobernantes que muchas veces resultan corruptos, lo que los lleva a muchas decepciones y sobre todo a ser merecedores de la ira divina.
¿CÓMO LIBRARNOS DE LA MALDAD DEL MUNDO QUE NOS RODEA?
Que podemos hacer nosotros para huir de la desaprobación divina, practicar la justicia, pero la justicia de Dios, no nuestra justicia, para eso necesitamos tener un conocimiento exacto de los caminos de Dios, conocer sus leyes y principios y actuar en conformidad, con la manera de pensar de Dios que es muy distinta a la forma de pensar que tenemos los seres humanos.
Por otra parte, necesitamos aprender a confiar en Dios Jehová, los problemas de la humanidad son tan graves que esta fuera del alcance de los seres humanos débiles e imperfectos solucionarlos, el único que puede hacerlo es el Dios verdadero Jehová, mediante su gobierno en manos de su hijo nuestro señor Jesucristo. A Él sea la gloria y alabanza para siempre por toda la eternidad, por ser el Dios que nos librará de toda clase de injusticia y maldad.
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