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viernes, 18 de agosto de 2017

OBREMOS CON PRUDENCIA ANTES DE LA GRAN TRIBULACIÓN

La prudencia es necesaria en este tiempo del fin.

Era el año 1911, hasta esa fecha no se había logrado llegar al polo sur, por este motivo se conformaron dos expediciones, una al mando del noruego Roald Amundsen y otro a cargo del británico, Robert Falcon Scott.






Cual de los dos grupos, demostraría prudencia en este viaje tan peligroso al polo sur, donde existía un frío muy intenso y falta de alimento. 
Bueno el señor Roald Amundsen, antes de realizar el viaje, se asesoró con los esquímales quienes le dijeron que tenía que usar trineos jalados por perros, viajar seis horas y después descansar, ubicar a lo largo del camino alimentos, bien señalizados para ubicarlos con facilidad, adicionalmente tenía que comprar vestimenta de la mejor calidad, y lentes para protegerse del reflejo de la nieve de óptima calidad.

El otro grupo conformado por el británico Robert Falcón Scott, no tomó las mismas precauciones, decidió utilizar vehículos motorizados y caballos para su viaje, adicionalmente la vestimenta y los lentes que compró no eran de la mejor calidad y por último, ubicó los alimentos a distancias muy grandes y mal señalizados.

El noruego Roald Admundsen, logro llegar al polo sur, un mes antes que su competidor,  planto la bandera noruega y regreso con toda su tripulación vivos.



 Pero que sucedió con su competidor, Robert Falcon Scott, bueno este señor a los pocos días de su partida tuvo inconvenientes, los vehículos motorizados fallaron debido al intenso frío, tuvieron que sacrificar a los caballos y su tripulación tuvo que jalar los trineos, adicionalmente experimentaron mucho frío debido a la mala calidad de su ropa, y fueron cegados por el resplandor de la nieve, debido a los lentes de pésima calidad, los hombres agotados por el frío y las enfermedades, empezaron a morir ya que no podían ubicar los alimentos mal señalizados, aunque lograron llegar al polo sur, no pudieron regresar con vida puesto que todos murieron al regreso, de este hecho tenemos conocimiento por que el señor Robert Falcon Scott, escribió sus experiencias antes de morir.
Esta experiencia nos enseña a ser prudentes al tomar decisiones respecto a aspectos relacionados con este tiempo, el fin de este sistema de cosas.


Pruebas de que estamos viviendo en el tiempo del fin.

Los testigos de Jehová, estamos convencidos de que estamos viviendo en el tiempo del fin o de la conclusión de este sistema de cosas por lo tanto es necesario considerar este hecho ya que es un asunto de vida o muerte.

La humanidad esta en una encrucijada y no puede continuar el derrotero que tiene actualmente, por eso comentaristas muy importantes coinciden en lo siguiente, tal como lo señaló el señor Lester Brown quien dijo: "Al adentrarse en este tiempo el hombre se halla en un momento crucial: lo que hagan las personas que viven ahora mismo determinará el futuro, y hasta la supervivencia de la especie. No contamos con generaciones, sino solo con años para tratar de cambiar las cosas."

Otras pruebas importantes incluyen las condiciones actuales que fueron predichas en la Biblia, escasez de alimento cada vez más creciente, crecimiento descontrolado de la población, escasez de agua, trastornos causados por la contaminación, insuficiencia de combustible e incluso amenazas al nivel de oxígeno. Todas estas pruebas nos demuestran que estamos en los últimos predichos en la Biblia.











Que posición debemos adoptar cada uno de nosotros.


Es importante meditar en el proceder que más nos conviene seguir
buscar las respuestas, en tal caso determinar a quien acudir a los hombres o a Dios.
Que clase de amigos vamos a cultivar, con reformistas, o con personas que buscan la aprobación de Dios y esperan sobrevivir.


Imitemos a los cristianos del primer siglo obrando prudentemente al acercarse el fin.


El consejo bíblico de 1 Pedro 4: 7, nos es muy útil en este tiempo.

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